Está sucediendo algo sorprendente en estos tiempos, hay muchas conversiones pero nadie sabe cómo responder a esto. Realmente cual es el asunto, aún los asistentes más comprometidos están asistiendo menos a la iglesia.
Podemos asegurar que esta tendencia ha estado sucediendo por muchos años (esta muy lejano los días cuando la gente asistía 50 a 52 los domingos al año), pero el tema está llegando a un punto muy preocupante en la iglesia de nuestros días.
Escribí sobre esto hace dos años, en un estudio llamado “Siete maneras de responder a medida que la gente atiende menos a la iglesia”. En los últimos 24 meses las conversaciones han venido siendo mucho más frecuentes, por lo tanto los líderes sienten que es más urgente encontrar la solución a este problema.
Este no es un estudio de por qué la gente ha dejado la iglesia (eso es un tema diferente), este es el primero de una serie de post acerca de los que asisten a la iglesia con amor a Dios, que aprecian la iglesia local, y aún están involucrados en su iglesia local, pero que simplemente llegan con menos frecuencia.
Entonces, ¿por qué le estamos dando tanta atención a esto?
Esta tendencia no nos lleva a ninguna parte… de hecho esto nos muestra que se está acelerando. Esto impacta a todas las iglesias sin importar el tamaño, denominación o incluso su ubicación.
Probablemente esto marque drásticamente el futuro de la iglesia con respecto a lo que está pasando.
Por supuesto, la asistencia a la iglesia nunca debería ser el objetivo. Pero la asistencia es un signo de algo más profundo que cada líder de la iglesia tiene que luchar en los próximos años.
La primera clave para abordar este asunto es entender lo que está sucediendo. Así que … ¿por qué incluso los miembros comprometidos están asistiendo con menos frecuencia?
Hay por lo menos 10 razones:
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Mayor comodidad económica.
El dinero da a las personas mas opciones y oportunidades, y si tu iglesia está formada por personas de clase media o incluso alta, puede ser uno de los principales motivos por la baja asistencia en la iglesia, según la ubicación donde vivan, esta es una tendencia en desarrollo.
La clase media está encogiéndose, pero como muestra este informe del New York Times, se está reduciendo (en parte) porque más de la clase media se está convirtiendo en clase alta. Tanto los ingresos personales de los Estados Unidos como los canadienses están en los máximos históricos.
Simplemente hay gente más rica que hace décadas, lo que puede explicar en parte por qué tantas personas «promedio» satisfacen sus obsesiones, por ejemplo remodelar muebles de cocina con con cubiertas de granito y mármol, casas de diseño y coches decentes, etc, incluso sin ser super ricos.
Naturalmente esto nos deja un profundo vacío teológico con respecto al conocimiento de la palabra de Dios, como una necesidad, porque, al no tener necesidad de las cosas básicas que carece mucha gente, se olvidan de Dios. Y en lugar de esto, estas personas están más preocupadas por satisfacer sus lujos, y por supuesto esto baja la afluencia en las iglesias, quedándonos prácticamente solo con la gente más humilde, ya que como personas pobres necesitan de Dios, por lo tanto tenemos que esforzarnos trabajando más y más para poder solucionar esta problemática.
Por favor … No estoy discutiendo que las cosas deberían ser así. Simplemente estoy mostrando que esto parece ser lo que está sucediendo.
Y otra vez … la gente con dinero tiene opciones. Opciones tecnológicas. Opciones de viaje. Opciones para sus hijos. Y esa afluencia puede ser uno de los factores que los alejan de un compromiso con la misión de la iglesia local.
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Un mayor enfoque en las actividades de los niños
Un número creciente de niños están practicando deportes, jugando en equipos que requieren viajar. Muchos de esos deportes ocurren los fines de semana. Y los padres ricos están eligiendo deportes sobre la iglesia, sin importarles el crecimiento espiritual de sus hijos, tan simple como eso.
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Más viajes
A pesar de una economía vacilante, los viajes están en aumento, tanto por negocios como por placer.
Cada vez más familias de diferentes edades están viajando simplemente por ocio, olvidándose por completo de su iglesia y del mandamiento de Dios (“no dejando de congregaros como algunos tienen por costumbre”, que encontramos en el libro de Hebreos). La gente está tan apartada de Dios que incluso prefieren ir a acampar o a visitar a los amigos para el fin de semana o un fin de semana en el lago que asistir a la iglesia.
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Familias mezcladas y padres solteros.
Cada vez más familias mezcladas y padres solteros están encontrando un hogar en la iglesia, en realidad ahí encuentran amor, el verdadero amor que solo Dios puede dar.
Entonces, ¿cómo podemos trasladar esto a la asistencia en la iglesia?
Los líderes de la iglesia necesitan recordar que cuando la custodia se comparte en una situación familiar, la asistencia «perfecta» para un niño o adolescente puede ser de 26 domingos al año.
Del mismo modo, algunos miembros no podrían estar en la iglesia por falta de un transporte, muchas veces les imposibilita el poder asistir.
Por lo tanto, aquí nos encontramos con un giro extraño. Las personas que tienen un coche a menudo no están en la iglesia porque tienen un coche. Las personas que quieren estar en la iglesia a menudo no están en la iglesia porque no tienen un coche o porque no es su «fin de semana» para la iglesia.
Lamentablemente, las personas que quieren ir a la iglesia simplemente no pueden.
Por cierto, dirijo una iglesia que prácticamente requiere un vehículo para llegar allí. Me encanta la forma en que a menudo vemos a las personas con transporte ayudar a aquellos que no tienen un vehículo. Eso es al menos un remedio parcial a este problema. Ayudemos a quienes necesitan.
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Opciones en Línea, con el uso de Internet.
Muchas iglesias han creado una presencia en los medios sociales y muchos mensajes publicados en sitios web.
Iglesias también están lanzando sus enseñanzas en línea que le brindan todo el servicio en su teléfono, tablet o TV.
Hay pros y contras de la iglesia en línea y no hay duda de que las iglesias con una fuerte presencia en línea han visto que afecta la asistencia física. Esta tendencia ha presenciar el servicio en línea, realmente no es lo que enseña la Palabra de Dios, porque no hay comunión de los santos, no hay ningun esfuerzo fisico, y aún más realmente no están completamente atentos al culto, cualquier cosa los puede distraer. En fin no es lo mismo estar físicamente en la iglesia que estar cómodamente en casa, por lo tanto si su iglesia tiene o no opciones en línea no hace que el problema desaparezca.
La iglesia en línea está aquí para quedarse, sin importar lo que mencionamos anteriormente de la comunión de los santos, ya sea que participes o no.
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La desaparición cultural de la culpa
Cuando crecí, me sentía culpable por no estar en la iglesia los domingos. El número de personas que se sienten culpables por no estar en la iglesia el domingo se disminuye cada día.
Regularmente me encuentro con gente todo el tiempo que no han estado en meses, pero dicen amar a la iglesia.
Si tu ya no sientes un cargo de conciencia por no ir a la iglesia necesitas ayuda.
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Autodirección espiritual.
Las personas están buscando cada día menos a la iglesia y a sus líderes en busca de ayuda.
Vivimos en una época en la que ningún padre hace una visita al médico, sin haber buscado por primera vez los síntomas de la enfermedad de un niño y un tratamiento recomendado. De hecho antes que nada buscan en Google como si fueran los nuevos médicos para mejorar la salud de sus hijos. (Los doctores de google no son un reemplazo de una escuela médica o práctica reconocida). De la misma manera no es lo mismo ver un culto en línea que estar sentado en la banca de una iglesia.
Del mismo modo, ¿cuándo fue la última vez que compró un coche sin investigar por completo en línea?
Es una época en la que tenemos acceso a todo, cada vez más personas se auto-dirigen su espiritualidad … para bien o para mal.
Estamos viviendo en el tiempo que las personas ya no quieren confiar en la iglesia piensan que es una institución, no entienden que es la casa de Dios donde van a escuchar lo que Dios nos dice en su Palabra.
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Falla de no ver un beneficio directo.
La gente siempre toma tiempo para las cosas que más valoran. Si no están haciendo tiempo para la iglesia, eso te dice algo.
Incluso entre las personas que dicen que tienen gran amor a la iglesia, la disminución de la asistencia nos muestra un problema, es probable que sea porque no ven un beneficio directo. No ven el valor de estar allí semana tras semana.
Esto podría suceder simplemente porque no lo valoran o podría ser porque simplemente hay un valor que no ven. El hecho de no ver un beneficio directo siempre da lugar a un compromiso decreciente (falta de asistencia a la iglesia).
Entonces, ¿qué estás haciendo o no, que le haga sentir a las personas que no hay mucho valor?
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Valorar la asistencia y la participación
Déjame decirte que cuando alguien simplemente asiste a la iglesia, la probabilidad de aparecer regularmente o incluso la participación de su fe disminuye con el tiempo.
En una iglesia la persona que está más comprometida al servir, dar y ayudar a los demás son los que asisten con mayor regularidad.
Nunca te olvides de valorar la asistencia de las personas y su servicio, felicitalas cada día que hagan algo por Dios eso ayudará a que asistan regularmente.
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Un cambio cultural masivo
Todas estas tendencias que hemos mencionado anteriormente nos indican que nuestra cultura está cambiando completamente.
Los líderes de la iglesia que no logran reconocer esto, no podrán cambiar con la suficiente rapidez como para responder a los cambios que están ocurriendo a nivel global.
El cambio es poco amable para los desprevenidos, así que prepárate.
Escrito por Carey Nieuwhof
CareyNieuwhof.com
Además de servir como Pastor Principal en la Iglesia Comunitaria de Connexus al norte de Toronto, Canadá, Carey Nieuwhof habla en conferencias e iglesias en toda América del Norte sobre el liderazgo, la familia, la crianza de los hijos y la renovación personal.
Traducido y adaptado por José Alberto Vega
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